Los codales, al igual que en la anterior edició, llevarán las palabras "LUZ" y "VIDA" respectivamente. Estas palabras engloban en ellas la esperanza de quienes están en la última etapa de su vida, la solidaridad y el amor que los Donantes y sus familias entregan junto con el órgano de un ser muy querido a quienes esperan. Esa Luz ilumina a ambas partes.
Antes de la fundición de estas velas hubo una breve introducción al acto por parte de un grupo de trasplantados y de la generosa familia de un Donante fallecido.
Tuvimos la oportunidad de conocer de las historias de lucha y superación de Andrés, trasplantado de riñón hace quince meses y que aún no se cree la libertad de la que dispone al no estar conectado a su máquina de diálisis 4 horas días alternos, Manolo, trasplantado de corazón hace 19 años ha vivido el nacimiento de sus nietos, impensable para él. Enrique también trasplantado de corazón hace mucho menos, recibió la llamada de su "regalo de vida" un día de Reyes.
Por último nos habló Pilar, hija de Donante, que se fue hace poco más de un año dando vida, generosamente , tal y como vivió.
Posteriormente se fundieron los codales, y lucirán en agradecimiento a todos los Donantes de Órganos junto a la Madre, en un lugar de privilegio
Fuente: Carmen Redondo / Sevilla Regala Vida
